hbvtux

Aqui hay poquito de todo

La marea rosa 2.0: cómo creció el socialismo en América Latina, sus logros, sus fallas y por qué sus mensajes son casi todos iguales

Published by

on

¿Te imaginas un mapa de América Latina en el que una ola gigante cambia los colores de muchos países? Bueno… en cierta forma eso pasó. Desde finales de los años 90 hasta hoy, ha habido un fenómeno que los politólogos llaman la “marea rosa”, es decir, una oleada de gobiernos de izquierda —socialistas, socialdemócratas, progresistas— que tomaron el poder en varios países latinoamericanos.

Pero esto no fue solo un cambio de gobierno: fue también un cambio de mensajes, de prioridades y de expectativas. Y como todo cambio ambicioso, tuvo sus éxitos (sí, de verdad) y sus tropiezos (también de verdad). En este artículo te cuento el recorrido desde los 90s hasta hoy, qué se logró, dónde se quedó corto y por qué —spoiler— los logos de campaña y los lemas de la izquierda latinoamericana se parecen tanto (aunque cada país los pinte con sus colores).

Espero que sepas nadar, que nos vamos a sumergir.

¿Qué es la “marea rosa” (y por qué deberías saberlo)?

El término “Pink Tide” (marea rosa) se usa para describir la ola de gobiernos de izquierda en América Latina desde fines del siglo XX.

Dos grandes fases

  • Primera ola (aprox. 1998-2014): arranca con líderes como Hugo Chávez en Venezuela (1998), Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil (2003), Evo Morales en Bolivia (2006), Rafael Correa en Ecuador (2007). En esta fase, ganaron elecciones democráticas, aprovecharon altos precios de recursos naturales, expandieron programas sociales.
  • Segunda ola (aprox. 2018-hoy): tras unos años de retroceso y derecha, vuelve el giro a la izquierda en varios países: México (Andrés Manuel López Obrador), Chile (Gabriel Boric), Brasil con Lula de nuevo, Colombia (Gustavo Petro). Pero esta segunda etapa enfrenta un mundo más complicado: menos “gratis” de parte del boom de materias primas, más globalización, más crisis.

¿Por qué creció esta ola?

  • En los 90s muchas economías latinoamericanas vivían las secuelas del neoliberalismo, crisis de deuda, privatizaciones y desigualdad social.
  • Los movimientos sociales (indígenas, comunidades rurales, sindicatos) ganaron fuerza y exigieron protagonismo político.
  • Alta recaudación de recursos naturales permitió a varios gobiernos financiar gasto social.
  • La izquierda renovó su discurso: más presencia del “pueblo”, más retórica de justicia social, menos tabúes sobre intervencionismo estatal.

Logros: sí, los hubo y pueden marcar la diferencia

Una cosa es prometer y otra cosa es entregar. Pues varios gobiernos de esa ola sí entregaron avances reales en ámbitos sociales y económicos.

Reducción de la pobreza y de la desigualdad

  • Según un análisis del Banco Mundial, la pobreza extrema (con la línea de US$ 4/día) cayó en la región de ~45 % a ~25 % entre 2000 y 2014.
  • El índice de Gini (medida de desigualdad) en América Latina pasó de ~0.57 en 2000 a ~0.52 en 2012.
  • Un estudio específico concluye que los gobiernos de izquierda redujeron la desigualdad más rápido que los de otras orientaciones.

Programas sociales que marcaron pauta

  • En Brasil, el programa “Bolsa Família” y su antecesor “Fome Zero” se volvieron emblemáticos: transferencia condicionada de dinero para pobres a cambio de salud y educación. Estudios indican que bajaron la desigualdad y mejoraron los ingresos de los deciles bajos.
  • En Ecuador, bajo Correa, la pobreza bajó de ~36.7% en 2006 a ~22.5% en 2016.
  • En Bolivia, el MAS utilizó ingresos del gas y del litio para expandir servicios sociales, infraestructura y programas dirigidos a indígenas.
  • En general, se fortalecieron los salarios mínimos, pensiones, cobertura de salud, lo que ayudó a que sectores históricamente excluidos entraran al juego político y social.

Aumento de la clase media

  • En el documento de Lustig et al., se señala que en la década de los 2000 la proporción de la “clase media” en la región pasó de ~22% a ~34%. Esto significa que algo más de personas lograron salir de la pobreza o del umbral vulnerable.

Fallas y límites: cuando “la ola” se enfría o se atasca

Aunque hubo avances, también apareció el otro lado de la moneda: condiciones estructurales que la ola no pudo romper del todo, o que luego se revelaron vulnerables.

Dependencia del boom de materias primas

  • Muchos gobiernos de izquierda contaron con altos ingresos gracias a la subida de precios del petróleo, gas, minerales entre 2003-2013. Cuando los precios bajaron (a partir de ~2014) el margen fiscal se redujo y los programas sociales tuvieron que ajustarse.

Instituciones débiles, personalismos, concentración del poder

En algunos países, la izquierda gobernó fuerte, pero la institucionalidad (justicia, medios, órganos de control) no se reforzó. Esto generó dependencia de líderes carismáticos, falta de renovación, riesgo de autoritarismo. Un análisis señala: “Estos gobiernos lograron reducir significativamente la pobreza, pero no disminuir la concentración del ingreso y la riqueza en el pequeño grupo de millonarios…”

Seguridad y crimen: el talón de Aquiles

  • La violencia, el narcotráfico, las pandillas y la inseguridad no se atendieron automáticamente por tener un gobierno de izquierda. La clave está en capacidad estatal, justicia y fuerza pública. Mucha izquierda dejó ese tema rezagado.

Movilidad limitada: salir de la pobreza no siempre es llegar a la clase media segura

  • Aunque más personas salieron de la pobreza, eso no siempre significó ascender a una categoría estable de clase media con empleo formal, vivienda propia y estabilidad. Muchos quedaron en la franja vulnerable.

Ejemplos extremos

  • En Venezuela, bajo Chávez bajó la pobreza al inicio, pero debido a la combinación de caída de petróleo + mala gestión la crisis se acentuó después.
  • Otros países de la ola empezaron a tener retrocesos o ajustes después de 2014-15.

Las campañas de la izquierda latinoamericana: ¿por qué se ven tan parecidas?

Algo destacado es que muchas campañas de la izquierda latino usan el mismo guion, con pequeñas variaciones según el país. Aquí van los ingredientes.

El “pueblo” como protagonista

Lemas como:

  • El pueblo unido jamás será vencido” (histórico república latino).
  • En México: “Por el bien de todos, primero los pobres” (AMLO).
  • En Brasil: “Brasil para todos”.

El discurso muestra: “Nosotros, que antes fuimos excluidos, vamos al centro”.

Soberanía nacional, orgullo y control de recursos

  • Patria, socialismo o muerte” (Venezuela).
  • Patria altiva y soberana” (Ecuador).
  • Proceso de Cambio” (Bolivia).

Se enfatiza: “No más dominio externo, los recursos y las decisiones son nuestros”.

Justicia social y derechos

  • Campañas que dicen: “Salud, educación, vivienda para quienes siempre estuvieron al margen”.
  • Colores populares, símbolos de comunidad, rostros de gente común, redes sociales activas.

Cambio, anticorrupción, ruptura con el viejo régimen

  • Colores nacionales + rojo + verde + elementos indígenas/afro.
  • Iconos de manos unidas, puños, horizonte ascendente.
  • Fotografía de proximidad: candidato en barrio, en fábrica, en charla con la gente.

¿Qué significa todo esto?

  • Que los mensajes sí importan, pero los resultados cuentan más: ver si bajó la pobreza, si mejoró la seguridad, si hay empleo digno.
  • Que un gobierno de izquierda no es garantía automática de bienestar: la clave está en cómo gobierna, en instituciones y en modelo económico.
  • Que los temas de movilidad social, empleo formal, innovación, diversidad van a ser centrales en las próximas décadas: la vieja política de “estado social” debe adaptarse.
  • Que la comunicación política importa muchísimo: entender los símbolos, el lenguaje, los lemas ayuda a detectar lo que proponen.
  • Que como ciudadano tienes poder: exigir transparencia, datos y rendición de cuentas, más allá del discurso.
Fuentes consultadas

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.